Acabadas las festividades toca hacer balance, volver a meterse en el traje para ir al trabajo y recuperar la forma física que un día descuidamos… Es el momento de los propósitos para mejorar.
Perder esos kilos de grasa superflua es ganar en salud y autoestima, y también en juventud, porque recuperamos silueta, movimiento, agilidad… Es un proceso que, para llegar a buen fin, es de una importancia vital que se realice siempre BAJO CONTROL MÉDICO.
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