Indicaciones para hacer una rinomodelación

La rinomodelación está indicada en personas que desean corregir imperfecciones estéticas leves o moderadas de la nariz sin cirugía. Es ideal si:

• Tienes una punta nasal caída y deseas levantarla.
• Quieres camuflar un caballete o giba en el dorso de la nariz.
• Buscas mejorar la simetría nasal sin modificar el hueso.
• Deseas refinar el perfil facial de forma rápida y segura.
• Te has hecho una rinoplastia y quieres corregir pequeños detalles.
• Buscas un cambio estético reversible y sin anestesia general.
• No tienes problemas respiratorios o desviaciones internas importantes.

No está recomendada si lo que necesitas es una corrección funcional (respirar mejor, enderezar el tabique) o si hay malformaciones estructurales graves.

Recomendaciones después de la rinomodelación

• No toques ni presiones la nariz durante las primeras 24–48 horas.
• Evita usar gafas pesadas que apoyen sobre el puente nasal durante los primeros días.
• No te expongas a fuentes de calor intenso: sauna, baños turcos o sol directo en las primeras 48 h.
• No hagas ejercicio intenso al menos durante 24 horas.
• No te hagas masajes ni limpiezas faciales profundas hasta que lo indique el especialista.
• Aplica frío local si hay inflamación, sin presionar.
• Acude a la revisión si se programa una cita de control.
• Si notas dolor intenso, enrojecimiento persistente o alteración del color de la piel, consulta inmediatamente.